5 de julio de 2011

Cérvidos - Gamo (Dama dama)

CLASE: Mamíferos
ORDEN: Artiodáctilos
FAMILIA: Cérvidos
GENERO Y ESPECIE: Dama dama


Se diferencia del otro gran cérvido europeo, el ciervo común (Cervus elaphus), en su menor tamaño, sus astas palmeadas y su bello manto de pelo pardo-rojizo salpicado de motas blancas en primavera y verano (ocasionalmente con una banda oscura en el lomo).


En la actualidad los gamos se han introducido en gran parte de Europa y además en Estados Unidos, México, Perú, Chile, Argentina, Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda e islas Fiyi.



El gamo presenta un notable dimorfismo sexual. Únicamente los machos tiene astas que están inclinadas hacia atrás, y presentan tres candiles y una zona palmeada, típicos de la especie. La cornamenta muda anualmente, como en la mayoría de los cérvidos, cayéndose a finales de marzo o principios de abril para empezar a crecer inmediatamente, completándose su crecimiento a finales de junio y julio.


La longitud del gamo varía entre los 129-155 cm de los machos y los 118-140 cm de las hembras. El peso medio para los machos es de 58 kg y 45 kg para las hembras.




LEEMOS SOBRE EL GAMO

Mientras pasta en el sosiego de la llanura, un ruido lejano e inquitante llega hasta sus oídos sensibles. El animal levanta la imponente cornamenta y, por un momento, permanece inmóvil.

Basta un segundo para que advierta que la jauría se aproxima. El gamo comienza a andar despacio, pero su inquietud va creciendo a medida que los ladridos se hacen más fuertes. Entonces, trota rapidamente y luego se lanza al galope por el bosque de árboles dispersos.


Su galope es veloz y acompasado: un movimiento de las patas delanteras; luego, las cuatro en el aire, y, a continuación, el impulso más vigoroso de los remos traseros. De tanto en tanto, un obstáculo le obliga a dar saltos de hasta dos metros de altura.

Pero los enemigos continuan aproximándose. Más ágil y más rápido que el ciervo, su pariente, el gamo continua corriendo hasta alcanzar un río. Se lanza al agua y nada hasta la otra orilla, empujado por la corriente que lo arrastra río abajo.


Finalmente alcanza la margen opuesta, trepa y continua su galope. Esta vez, el tiempo que perderán los cazadores para cruzar el río y reencontrar el rastro le salvrán la vida.


Su sabrosa y abundane carne constituyó una de las causas por las que el gamo fue tan perseguido en Europa. Otra, sin duda, la excitante atracción de cazar a un animal tan veloz.

Esta especie prefiere los bosques de hoja caduca relativamente húmedos, donde se alimenta preferentemente de hojas de árboles y arbustos y en menor medida de hierbas. En la antigüedad, el gamo se convirtió en una presa codiciada por los cazadores, sobre todo los pertenecientes a las clases altas.


Esto, paradójicamente, contribuyó a su conservación e introducción en varios lugares donde antes no estaba presente o se había extinguido durante la última era glacial. La mayor expansión se produjo durante el Imperio romano y la Edad Media, cuando la especie fue introducida en Europa central, las Islas Británicas y el sur de la Península Escandinava y Finlandia.

Al contrario que otros cérvidos de su tamaño, no forma manadas sino que vive en grupos familiares de menos de 10 individuos, o bien lleva una vida solitaria. Un macho se une a uno de estos grupos durante la época de celo, normalmente en octubre. En junnio las hembras preñadas paren una cría, rara vez dos o incluso tres.


Reproducción

El gamo es una especie polígama. La época de apareamiento tiene lugar a principios de otoño, recién terminada la de los ciervos, este periodo recibe el nombre de la ronca, en referencia al sonido que emiten los machos para advertir a sus oponentes y atraer a las hembras.


Los machos adultos marcan su territorio y compiten con otros machos por el dominio y derecho a cubrir a las hembras. El periodo de gestación dura 8 meses y generalmente tienen una cría por cada embarazo, produciéndose los partos a partir de finales de mayo.
Durante el invierno, el pelaje de los gamos adquiere una coloración más oscura. Pero, además de esas variaciones periódicas más comunes, se produce en la especie otras mutaciones de color. Existen ejemplaresenteramente negros, y otros de pelaje albino.

Una característica importante para la clasificación científica de los gamos, es su manera de pisar. El animal camina apoyando cada pata en la punta de dos dedos provistos de pezuñas. Semeja el delicado paso de una bailarina, aunque lo efectua naturalmente.



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1 comentario:

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