Pez de agua dulce originario de los países de Europa central. Solo el esturión lo supera en tamaño y peso. En condiciones favorables, puede alcanzar los 300 cm de longitud y 150 kg de peso, aunque no se haya registrado espécimen de semejante tamaño en más de 100 años.
Es un pez sedentario que busca aguas calmas, profundas y turbias. Predador muy voraz, en su primera etapa de vida se alimenta de invertebrados y en la fase adulta busca peces y cangrejos. Ocasionalmente captura también ranas, roedores y aves acuáticas.
LEEMOS SOBRE EL PEZ GATO
De noche, las aguas turbias del río fangoso son casi impenetrables para la visión de los peces. Aún así, a esa hora aparentemente inadecuada es cuando el gigantesco pez-gato, o siluro del Danubio, como también se lo denomina, despierta de su sueño nocturno, y se dedica a cazar.
Para él, la oscuridad y la opacidad del agua constituyen una ventaja. Lo ayudan a encubrir su cuerpo enorme. Para localizar a sus posibles presas posee otros sentidos eficaces. Las largas barbillas, por ejemplo, que además le dieron su nombre por asemejarse a los bigotes del gato, son órganos sensibles que perciben las más débiles ondulaciones provocadas por el paso lejano de otros peces.
Este feroz cazador sabe distinguir muy bien esas ondulaciones, entre los restantes movimientos corrientes del agua. Sus oídos son también más sensibles, a causa de una característica particular: la vejiga natatoria -cámara de aire que posee la mayoría de los peces- está ligada a los oídos por una cadena de huesecillos.
Las vibraciones sonoras se propagan por esos huesos y son amplificadas en la cavidad formada por la vejiga natatoria. En el agua, el ruido causado por los numerosos animales se propaga rápidamente. Antes se pensaba que los peces era mudos, porque el sonido proveniente del agua no se propaga bien en el aire, y viceversa.
Hoy, sin embargo, se sabe que la mayoria de los peces produce sonidos vocales, que llegan a ser bastante intensos, y en ocasiones, audibles.
Otra característica que favorece los hábitos cazadores del pez-gato en su olfato sensible. Aunque casi todos los peces respiran por branquias, a las que comunmente llamamos agallas, todos, además, poseen un par de fosas nasales.
La lamprea y otros ciclóstomos tienen solo una, pero no son peces. Esas narices no sirven para respirar, pero sí para oler. En muchos peces las fosas nasales son cavidades de fondo ciego, forradas internamente por una película sensible, semejante a la pituitaria que reviste el interior de la nariz humana.
En otros, el fondo nasal termina en un tubo por donde pasa agua. Así equipado, el pez-gato no tiene mayores dificultades en sorprender a otros peces, y hasta roedores y aves que nadan en la superficie. Al no tener dientes, engulle enteras a sus presas.
Reproducción
Al fin de la primavera o a comienzos del verano boreal, entre mayo y junio, la hembra expele sus óvulos entre la vegetación del fondo del río y luego el macho los fecunda. Llegan a sumar 100.000 esferitas de unos 3 mm de diámetro cada una, con un revistimiento gelatinoso que las fija a las hojas. La concentración asegura una fecundación eficaz.
El macho rodea los huevos, los fecunda y luego permanece nadando cerca, para protegerlos. Después de una incubación de 7 a 10 días, de acuerdo con la temperatura ambiente, nacen las larvas, parecidas a renacuajos.
La pesca
La pesca del siluro es muy popular y a menudo espectacular. Dada su actividad nocturna, la pesca da resultados notables entre las 20.00 y las 24.00 horas y entre las 03.00 y las 06.00 horas. Conocido como el 'basurero' de los pantanos, el siluro es fácilmente atraído por la carne alterada, el hígado de cerdo y los intestinos de las aves, que son los más utilizados como cebo.
El anzuelo utilizado (simple o triple) debe ser grande y fuerte, en consonancia con la propia boca del pez. El siluro es atraído también por los tonos bajos. Los pescadores del Danubio usan una herramienta de madera, golpeando en el agua, produciendo un sonido similar al de un pequeño pez saltando sobre el agua, una rana o algún tipo de ave.
También se usan ondas de baja frecuencia, de baja intensidad, ya que tienen la propiedad de propagarse a través de largas distancias, obteniéndose resultados notables en tentar el siluro. El altavoz que se utiliza en este sistema debe poseer un diámetro pequeño, pero que pueda generar sonidos de baja frecuencia, y debe estar conectado a un generador electrónico de baja frecuencia.
El hilo
El hilo utilizado para la captura del siluro debe ser muy resistente, y el carrete debe ser del tipo 'masivo', y muy robusto. Suelen usarse hilos trenzados con alta resistencia ya que los siluros poseen una dentadura en la que sus dientes están dirigidos hacia dentro y son tan pequeños que en vez de cortar, desgarran.
Un hilo monofilamento, por mucha resistencia y anchura, le duraria muy poco en la boca, aunque si la captura no es demasiado grande, se saca sin problemas. Otra forma más económica, ya que el hilo trenzado es bastante más caro que el típico de nylon, es colocarle unos 40cm de hilo de acero en el exremo. No hace falta preocuparse por el brillo o la opacidad del hilo de acero ya que el siluro prácticamente no ve, sino que se guía por sus barbas que captan todas las vibraciones.
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1 comentario:
Eso es un siluro, no es lo mismo que un pez gato. El siluro es Silurus glanis y el pez gato Ameiurus melas
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