ORDEN: Escamados
FAMILIA: Varánidos
GENERO Y ESPECIE: Varanus Komodoensis
También llamado monstruo de Komodo y varano de Komodo, es el lagarto de mayor tamaño del mundo, con una longitud media de dos a tres metros y un peso de unos 70 kg.
A consecuencia de su tamaño, son los superpredadores de los ecosistemas en los que viven. A pesar de que estos lagartos se alimentan principalmente de carroña, también cazan y tienden emboscadas a sus presas, que incluyen invertebrados, aves y mamíferos.
Su excepcional tamaño y su reputación de animal temible los convierte en uno de los animales más populares de los zoológicos. En estado salvaje son una especie amenazada; su ámbito de distribución se ha reducido debido a las actividades humanas y están catalogados como vulnerables en la Lista Roja de la UICN.
La época de apareamiento comienza entre julio y agosto y la puesta de huevos en eptiembre. Depositan aproximadamente veinte huevos en nidos de megápodos abandonados, y los incuban durante siete u ocho meses, hasta su eclosión en abril, cuando los insectos son los más abundantes.
LEEMOS SOBRE EL DRAGON DE KOMODO
Extraviado, un cachorro de jabalí vaga por lak playa, buscando a su madre, cuando súbitamente se encuentra frente a un reptil enorme, del tamaño de un yacaré mediano. El animalito intenta huir, pero sus patitas no le permiten alejarse tan rápido como quisiera.
El dragón de Komodo, moviéndose con agilidad, lo atrapa enseguida. Otro lagarto, que llega en ese instante, también aferra la presa con los dientes y, en la disputa, el pequeño jabalí es despedazado y devorado en pocos minutos, por los famélicos reptiles.
No todos los saurios son tan rápidos como el dragón de Komodo. Pero suce que los Varánidos (familia de los saurios) se caracterizan , principalmente, por el gran desarrollo de las patas. Eso les permite alcanzar gran velocidad en carrera, y hasta pueden trepar a los árboles.
Hace sesenta millones de años ya existían antepasados de este animal. Pero, en esa época, Komodo y otras islas volcánicas del Pacífico, aún no habían emergido del mar. ¿Cómo llegaron los dragones a aquellas regiones?. Nadie lo sabe y quizás nunca lo sepamos.
Como quiera que sea, el hecho de que estos lagartos vivan confinados a unas pocas islas del archipiélago de Sonda, limita bastante los estragos que produce su comportamiento depredatorio. Todos sos hábitos y características demuestran gran peligrosidad para otras especies, excepto el hombre.
Los nativos lo cazan para alimentarse con su carne y aprovechan la piel para fabricar diveros utensillos.
El dragón de Komodo es capaz de correr a gran velocidad con los movimientos serpenteantes, típico de los lagartos. A pesar de su enorme peso, escala árboles con agilidad, y dentro del agua es casi insuperable como nadador y zambullidor. Puede permanecer casi una hora en el fondo.
Raramente ataca a los animales grandes, pero si se siente amenazado, sus mandíbulas y su cola son armas temibles, solo comparables a las del cocodrilo.
El olor que emana la carne en estado de putrefacción atrae a los saurios desde muy lejos. Los ejemplares jóvenes, más ágiles y veloces, llegan primero al festín, pero los viejos pronto los ahuyhentan.
Su desarrollo evolutivo comenzó con el género Varanus, que se originó en Asia hace aproximadamente 40 millones de años y emigró al continente australiano. Hace aproximadamente 15 millones de años, una colisión entre Australia y Asia Sudoriental permitió que los varánidos se trasladaran a lo que actualmente es el archipiélago indonesio, extendiendo su distribución hasta el este de la isla de Timor.
Se cree que el dragón de Komodo se distinguió de sus antepasados australianos hace 4 millones de años. Sin embargo, pruebas de fósiles recientes en Queensland sugieren que evolucionó en Australia antes de extenderse a Indonesia. La dramática bajada del nivel del mar durante el último período glaciar descubrió extensas zonas de la plataforma continental que el dragón de Komodo había colonizado, aislándolos en su ámbito actual de distribución cuando el nivel del mar subió de nuevo.
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